Más que por su música, en el último tiempo King Diamond ha hecho noticia por su afección cardiaca que obligó a un triple bypass. A fines de 2010 el danés estuvo por las cuerdas, sin embargo hoy parece completamente recuperado y, como se desprende de una reciente entrevista hecha por Jackie Kajzer en su programa Full Metal Jackie, a los 56 años King ha comenzado a planificar una nueva etapa de su carrera, la cual incluye, además de su disco número 13, algunas presentaciones en vivo como las que hizo en festivales europeos a mediados de año (de paso, el rumor de un tour sudamericano en los próximos meses fue desmentido en su sitio oficial).
Pero este 2012 hay otro motivo para celebrar al viejo demonio: se cumple un cuarto de siglo de la aparición de Abigail, su segundo álbum luego de abandonar Mercyful Fate. Es justamente en este disco conceptual, lleno de pequeñas joyas como “A Mansion in Darkness”, “The Family Ghost” o la propia “Abigail” que King Diamond comienza a sonar como King Diamond: metal a media velocidad, melódico, técnico y con el aura siniestra que da la mezcla de sus múltiples recursos vocales.
Pero no es todo: Abigail está conformado por un puñado de temas que en directo envejece muy bien: los registros In Concert (1987) y Deadly Lullabyes (2004), pese a los cambios de integrantes, son una buena prueba de su vigencia. Y bien podría decirse que es justamente en 1987 cuando King comienza la etapa más brillante de su carrera, la cual se extiende, por lo bajo, a los tres siguientes discos: Them (1988) y Conspiracy (1989) y The Eye (1990).
“En Abigail escuchamos los inicios de power metal, pero su impacto e influencia ha sido más amplia a través de muchos subgéneros. Es un disco que, sorprendentemente, nos dio una de las voces de culto dentro del underground y una historia de terror espeluznante con una banda sonora increíble”, apunta la revista Decibel que publicó el making of de este álbum en su sección Hall of Fame.
Abigail, por lo demás, fue el primer disco del sello Roadrunner en entrar al Billboard 200 (con el puesto 123) tras vender 175 mil copias en las primeras semanas sólo en Estados Unidos.
Para el guitarrista sueco Andy LaRocque, quien ha trabajado junto a King desde Fatal Portrait (1986), es justamente Abigail su trabajo más apreciado. “Las canciones y toda la grabación estuvieron rodeadas de momentos mágicos”, dijo en una entrevista publicada en la página oficial de su colega de Judas Priest, K. K. Downing. “Hubo un gran espíritu y una atmósfera muy creativa, todavía la recuerdo como una de las mejores sesiones en las que haya participado”.
Un cuarto de siglo después, la historia de Jonathan, Miriam y la niña nacida el 7 del 7 de 1777 sigue contándose en estas nueve canciones inolvidables.