Steven Wilson es un trabajador incansable. Un obrero de la música. Inquieto, talentoso y creativo. Siempre se las arregla para mantener atentos y ansiosos a los fanáticos de Porcupine Tree. Cuando no está de gira con la banda o en el estudio registrando nuevas canciones, el líder y guitarrista echa mano a sus archivos personales y reedita viejos discos con nuevo material descartado de la obra original. Así por lo menos lo ha hecho con “In Absentia”, “Lightbulb Sun”, “Signify” o “Stupid Dream”, entre otros.
Hoy, en todo caso, la excusa es la salida al mercado del CD-DVD “Octane Twisted”, registro doble en vivo que capta lo mejor de su último disco en estudio de 2009, “The Incident” y que el 19 de noviembre pasado debutó en las disquerías a través de la etiqueta Kscope,
Se trata de un excelente resumen del tour promocional para “The Incident”, el mismo que duró cerca de un año y que tuvo su despedida en el Royal Albert Hall de Londres. El disco uno incluye íntegramente el álbum de 2009, mientras que la segunda parte aporta una suerte de mini grandes éxitos, con una versión de “Arriving Somewhere But Not Here” que destaca por el resto. Tengo que reconocer que se trata de una de mis canciones regalonas de PT, junto con “The Sound of Muzak, no tengo empacho en decirlo.
La referencia del álbum doble es la siguiente: todas las canciones se grabaron en Chicago The Riviera, el 30 de abril de 2010, salvo en la segunda parte, cuyos tracks 5 y 7 se captaron en el Royal Albert Hall, el 14 de octubre de 2010.
Por lo mismo, Steven Wilson no desaprovechó la ocasión para liberar otro DVD de PT con el show en Chicago y tal como lo comentaron Richard Barbieri y Gavin Harrison, tecladista y baterista respectivamente, “contiene agradables tomas de la banda frente a un animado público”. Tienen razón Wilson y compañía. “Octane Twisted” suena fresco, renovado, fuerte, pulcro y emotivo por momentos. Todo en su lugar y en la justa medida. Un ejemplo, la excelente versión de “Times Flies” que se extiende por más de 12 minutos.
Nada debe sorprender a estas alturas de Porcupine Tree. “Octane Twisted” es una muestra más de la calidad musical e interpretativa de los ingleses. Sin embargo, por el momento es complicado esperar nuevas canciones para un nuevo disco. Su líder continúa embarcado en nuevas aventuras musicales, a veces bastante lejanas de su agrupación de origen. Está claro, la prioridad es su carrera solista.
Tranquilos. No todo está perdido. La visita de Steven Wilson en abril pasado tuvo una doble finalidad: mostrar el material de sus trabajos solistas plasmados en “Insurgentes” (2008) y “Grace for Drowning” (2011); y sondear el nivel de popularidad de Porcupine Tree en Chile para una futura visita. Mientras soñamos despiertos con un Caupolicán repleto disfrutando del mejor show de PT, “Octane Twisted” es una excelente alternativa para continuar pacientemente la espera.
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