Antes del escueto anuncio con el que Ston Tempel Pilots comunicó el despido de su cantante, Scott Weiland, éste había hablado con la revista Rolling Stone sobre el futuro incierto de la banda.
Weiland había dicho que sentía que Stone Temple Pilots necesitaba “sangre nueva” en su formación para refrescar las energías y no seguir tocando los clásicos de siempre.
El cantante incluso tenía intenciones de que la banda grabara un nuevo trabajo con ese hipotético refresco de formación. Además, contó que seguía esperando una reunión de Velvet Revolver.