Dave Marsh, influyente crítico musical de Rolling Stone, es quien se opone a la inducción.
Cuento viejo este de los nominados o no nominados al Salón de la Fama. Sin embargo Kiss, una de las bandas todavía ausentes en el olimpo del rock creado por Rollins Stone a mediados de los ’80, pareciera no importarle demasiado.
Recientemente Paul Stanley insistió sobre el tema. Mientras Rush, Heart, Public Enemy, Donna Summer y Randy Newman son recibidos con los brazos abiertos en el polémico salón, «la banda más caliente del mundo», que este año cumple 40 años, todavía espera por ese momento. “Depende quién viva más, si nosotros o Jann Wenner”, explicó Stanley en clara referencia al editor en jefe de Rolling Stone.
Pero no muchos saben que el verdadero responsable del rechazo de este evento para Kiss es el periodista Dave Marsh. Marsh, una pieza fundamental para la elección de los artistas año tras año, aseguró a MTV que “KISS no es una banda, nunca lo fue ni lo será”.
En diálogo con el Huffington Post, Paul Stantley dio sus visiones respecto al asunto, alegando que le parece que existe cierta incoherencia, a menudo, cuando eligen los músicos integrantes del Salón de la Fama. ¿Hasta qué punto Laura Nyro es rock? ¿Madonna? Me pregunto, evitando herir susceptibilidades». Paul afirma que, si bien duele no ser considerados, no necesitan del Salón de la Fama.