Polémica causó la Rolling Stone al poner en su portada de agosto una fotografía del principal sospechoso del atentado en el maratón de Boston en abril, posando como si fuera una estrella del rock
«El terrorista: cómo un estudiante popular y prometedor, al que su familia le falló, cayó en manos del islam radical y se convirtió en un monstruo», dice el titular de la portada.
Según un comunicado de la publicación, el extenso reportaje que acompaña la portada presenta un «relato profundo de la vida» de Dzhokhar Tsarnaev, elaborado a partir de decenas de entrevistas de la autora del artículo, Janet Reitman, con amigos, profesores, vecinos y personas del entorno del joven acusado, así como con agentes implicados en su detención pocos días después del atentado contra el maratón de Boston.