Mañana, estaremos desde las 4 de la tarde en el teatro Caupolicán junto a nuestro compañero Walo Frías. Será una jornada para apoyar al conductor de Rock & Ruedas con música en vivo y todas nuestras energías puestas en apoyar su pronta recuperación.
Inspirados en el evento “Todos con Walo” aquí revisamos algunos clásicos que dan cuenta de la pasión de nuestro querido compañero. Motores, autos y carreteras, en un listado imperdible para cualquier amante de las tuercas y la velocidad.
1) THE BEATLES –DRIVE MY CAR
Beatles, chicas y un auto… una mezcla ganadora nos muestra el primer corte de “Rubber Soul”, disco con el que la banda cerró un exitoso 1965. Un rock and roll de guitarras, con un toque de piano y las armonías vocales marca registrada de Lennon, McCartney y Harrison.
2) VAN HALEN – PANAMA
Perteneciente a “1984”, el disco que selló la primera etapa junto a Davie Lee Roth, esta de Van Halen se refiere a un auto de carreras que el cantante vio correr en una competencia en Las Vegas, el Panama Express, una idea lírica para complementar su arsenal referido a chicas y juerga. Sin duda, un clásico instantáneo de la banda de los hermanos Van Halen.
3) RUSH – RED BARCHETTA
Este clásico de Rush está inspirado en el cuento corto “Un buen paseo matinal”, escrito por Richard Foster, que nos muestra un futuro donde manda “la ley del motor”, que establece algunos autos como ilegales. Uno de ellos es el “Barchetta Rojo”, que el protagonista saca a pasear. La progresión que generan Lee, Lifeson y Peart completan el cuadro de una de las imperdibles de su catálogo.
4) QUEEN – I’M IN LOVE WITH MY CAR
Escrita por el baterista Roger Taylor, “I’m In Love With My Car” está inspirada de forma explícita en su pasión por los automóviles. De hecho, en la versión que sale en el disco “A Night At The Opera” de 1975, podemos escuchar al motor de su Alfa Romeo. Entre 1977 y 1981, la canción era el momento en que Taylor se tomaba el protagonismo sobre el escenario, luciendo un rango alto inusual. Otro clásico para la colección de Queen.
5) SAMMY HAGAR – I CAN’T DRIVE 55
Antes de entrar a Van halen, Sammy Hagar ya tenía una carrera solista tras su paso por Montrose. Y el disco que mostraba en 1984, “VOA”, tenía como single destacado “I Can’t Drive 55”, haciendo alusión al límite de velocidad en las carreteras de los Estados Unidos, 55 millas por hora (89 km/hora), y a su extrañeza por conducir más despacio.
6) STEPPENWOLF – BORN TO BE WILD
Si pensamos en motores, esta se nos viene a la cabeza de inmediato. El himno que le dio sonido a la icónica imagen en la intro de “Easy Rider” de 1969 lo dio Steppenwolf, con uno de los riffs más reconocibles de la historia, y con miles de versiones dando vueltas. Sin duda, la original sigue siendo irremplazable.
7) LA RENGA – MOTORALMAISANGRE
De su disco del año 2000, “La Esquina Del Infinito”, La Renga se inspiró en la experiencia de Nélida Iglesias, conocida en Argentina como “La Abuela”, para dar con la letra de libertad y carretera de “Motoralmaisangre”. Nacida en Palermo en 1928, a sus 16 ya manejaba camiones. Hasta el día de hoy, va a las convenciones de motos manejando una Honda Rebel.
8) BUCKCHERRY – ON THE ROAD AGAIN
Escrita por Willie Nelson especialmente para la película “Honeysuckle Rose” de 1980, y protagonizada por el mismo cantautor, “On The Road Again” nos cuenta de la vida en carretera de cualquier músico recorriendo el país de punta a cabo. La canción toca una fibra cercana y evocativa, que se transmite a las diversas versiones que se les ha hecho, como esta de BuckCherry, con distorsión y rock and roll.
9) GOLDEN EARRING – RADAR LOVE
Una de las que no puede faltar en una lista de motores en el rock es este clásico indiscutido de los holandeses Golden Earring, de 1973. Su tempo nos evoca el manejar de noche, y su letra nos muestra la perspectiva de un conductor que va a ver a su chica. Un significado sencillo para un corte efectivo, un verdadero inmortal del rock.
10) JANIS JOPLIN – MERCEDES BENZ
Escrita junto a los poetas Michael McClure y Bob Neuwirth, y originalmente llamada “The Politician”, Janis Joplin despliega una efectiva crítica social en el track a capella “Mercedes Benz”. Joplin le pide a Dios una tele a color, una noche en la ciudad y un Mercedes-Benz, signos del materialismo ya imperante en 1970. El registro es sobrecogedor, 43 años después.