Las sociedades modernas se construyen entre todos… Pero, ¿es lo que estamos haciendo? ¿Estamos tomando decisiones realmente democráticas e inclusivas? La duda nos surge tras la entrevista que ayer hicimos en «Palabras sacan Palabras» al lonko del Consejo Territorial Indígena de Quellón, Cristián Chiguay, cuyo pueblo se opone a la construcción de un puente que una a la isla de Chiloé con el continente.
A simple vista, la conexión del pueblo chilote con Chile continental parece una gran decisión para sus habitantes, una herramienta de conectividad, un sueño a punto de cumplirse. Pero surgen estas voces que no han sido escuchadas, unas que nos hablan en otro idioma y en otras formas de construir su realidad. El lonko de Quellón nos habló de dioses, de naturaleza, de un pueblo que quiere sentirse digno y respetado. Cristián Chiguay dice que un puente sólo les sirve a las salmoneras y al consumo. Que él y su gente desean que su isla milenaria siga siendo isla porque si Dios hubiera querido otra cosa, no la hubiera rodeado de agua.
Claro, desde nuestra perspectiva, el lonko nos puede sonar extemporáneo, fuera de época. Pero quizás nosotros seamos los extemporáneos que no entendemos que los países avanzados se construyen desde la comunicación, desde el respeto y desde la integración de las culturas y las nacionalidades..