Luego de varios días de especulaciones, los doctores de Brian May descartaron cualquier tipo de cáncer en su cuerpo.
“Finalmente y gracias a Dios, estoy sano. Es un alivio muy grande. Lo celebré en el estudio tomando una taza de té”, contó el guitarrista de Queen tras conocer los resultados de sus exámenes.
Todo comenzó con un fuerte dolor de espalda luego de una cirugía que fue empeorando con los días. El también doctor en astrofísica reconoció que cuando escuchó la palabra cáncer, se sitió abrumado, pero que el apoyo de sus cercanos y de gente anónima fue fundamental para levantar el ánimo.
May fue internado en Navidad para realizarle exámenes de carácter urgente, los que felizmente salieron negativos.