Editorial de Freddy Stock, lunes 12 de mayo.
Es una gran oportunidad para la justicia y para la democracia… Tras un fallo unánime, la Corte de Apelaciones de Valdivia decidió desaforar al diputado de Renovación Nacional, Rosauro Martínez Labbé, para que se investigue su responsabilidad en el asesinato de tres miristas cometidos por una patrulla del ejército que estaba a su mando.
La solicitud de desafuero fue pedida por la ministra en visita Emma Díaz, quien investiga violaciones a los derechos humanos en la zona e intenta esclarecer lo ocurrido el 20 de septiembre de 1981, en la comuna de Panguipulli. Ese día, el diputado Rosauro Martínez -según su propia confesión- estaba a cargo de la «Operación Machete» que pretendía desarticular «guerrillas» en la cordillera de Neltume. Así, abatieron a los militantes del MIR Próspero del Carmen Guzmán Soto, Patricio Alejandro Calfuquir Hernández y José Eduardo Monsalve Sandoval. Pero la justicia investiga si, en realidad, estas muertes fueron homicidios calificados.
Con este desafuero, Rosauro Martínez estará obligado a contar su verdad para que esclarezca, también, investigaciones de prensa que lo vinculan a la DINA y a la CNI. Y, para la democracia, será la oportunidad de reflexionar sobre los representantes que los partidos políticos ofrecen para llevar a cabo sus ideales de sociedad…