Por Carlos Costas (Zé Carlos)
30/06/2014
Esta es la última entrega del Diario de Zé Carlos. Mañana vuelo de regreso a Santiago y les confieso que me entretuvo hacer este registro de los 25 días que duró esta cobertura. Agradezco el apoyo de Héctor Muñoz quien se encargó de actualizar el material que despaché desde Brasil. Fueron muchos programas y transmisiones, 12 vuelos, varias escalas y largas esperas en aeropuertos y hoteles. Pude ver cinco partidos en el estadio (los cuatro de nuestra Selección, más el de Argentina contra Irán en el Mineirao) y muchas, pero muchas horas de fútbol.
Leí 3 libros, muchas revistas, escuché harta música, me robaron un computador y afortunadamente no me resfríe. Los aires acondicionados son letales y un resfrío para los que trabajamos en radio es fatal. Buena comida, gente agradable y una estupenda convivencia con todos mis compañeros en esta cobertura.
Estas imágenes son algunos recuerdos que me deja esta experiencia en el Mundial de Brasil. Imágenes que sirven para despedir el Diario de Zé Carlos.
Muito obrigado.
Belo Horizonte. Buen clima para capear el invierno santiaguino
Desayuno de campeones en la casa estudio
Tenores en acción desde la casa estudio
Vista desde la casa estudio
Renato y Silvana, nuestros adorables anfitriones
Junto al Pancho Mouat brasileño en las afueras de Toca da Raposa
Siempre atento a la jugada
No es NY. Ridícula réplica de la estatua de la libertad en Cuiabá. Es la característica de una tienda de departamentos
Despachando junto a Danilo Díaz en el hotel de Cuiabá
Haciendo el programa en la sala de prensa del Maracaná
Con el ingeniero Walter Romero, en un rodizio cerca de Maracaná
Antes de salir al aire desde el estadio
Zé Carlos en una playa de Rio de Janeiro
Aprovechando una escala para despachar desde el aeropuerto, junto a Rodrigo Hernández
Esta fruta se llama Carambola y al cortarla queda en forma de estrella. Es rica
Barrio de Santa Teresa en Río y el apoyo a la verdeamarela
Monumento en homenaje a Zico en el hall de ingreso a Maracaná
Junto al Trovador y Sepúlveda previo a la derrota con Holanda en Sao Paulo
Siempre atento a la jugada