A mediados de 1969, costaba juntar en un solo lugar y de buena gana a John Lennon, Paul McCartney, George Harrison y Ringo Starr. Y eso que estaban grabando nuevo disco en los estudios de la EMI ubicados en la calle residencial Abbey Road, en el lado acomodado de Londres, en pleno verano.
Las grabaciones corrían de forma civilizada y tranquila, tanto que se tomaron de la manera más natural la forma de ir sellando las sesiones. El disco se llamaría «Abbey Road» y la foto de la portada la harían ahí mismo, a la salida del estudio, cruzando la calle.
Esta foto dice mucho. Cuatro tipos que habían pasado por todas juntos, y que estaban listos para emprender camino propio. Dejar el nido de los Fab Four y sellar su historia en conjunto. Antes, cuatro hermanos que parecían uno solo. El viernes 08 de agosto de 1969, cuatro desconocidos que trataban de aprender a tolerarse. Como amigos que nunca dejaron de ser, a pesar de las distancias.