Esto sí que es no saber leer las sensibilidades del país… Y la miopía o derechamente el analfabetismo político es de los que tomaron la decisión, el año pasado, de gastarse más de 770 millones de pesos en la habilitación de una cafetería para la Cámara de Diputados… La cifra se hace aún más cuestionable en las circunstancias en las que se conoce, como es el plan de austeridad que públicamente decretó la Cámara Baja desde junio y la discusión ciudadana que significa aumentar el cupo de Diputados sin que ello represente mayor gasto al Estado.
Según la información filtrada a la prensa, la cafetería forma parte de una renovación al patio de luz de la Cámara y fue aprobada en 2013 para darle mayor privacidad al trabajo de los parlamentarios.
La cafetería está vedada para visitantes pero sus detalles fueron dados a conocer en medio de la polémica que existe entre la Corporación que administra la Cámara y los funcionarios que ven peligrar sus puestos de trabajo si se aplican despidos para asumir los costos de la reforma al sistema electoral que significa la llegada de 30 nuevos diputados.
Según Biobío, esos mismos funcionarios contaron que para este Mundial de Fútbol, los diputados reemplazaron los televisores instalados en los comedores de sus respectivas bancadas por televisores Led de 42 pulgadas.
Son síntomas de indolencia, de frivolidad de ciertos parlamentarios frente a la realidad del país. Y frente a las personas que que día a día trabajan con ellos -y para ellos- en el Palacio Legislativo instalado en Valparaíso…