Si te gusta la música, te recomiendo esta entrevista… La trae Emol y es al maestro Roberto Bravo quien cumple ya medio siglo al frente de un piano, un instrumento, dice, que le ha permitido “sanar los dolores de mi alma”.
A los 71 años, la misma de edad que ya disfrutan los grandes próceres del rock que siguen en los escenarios, Roberto Bravo no para de hacer conciertos y de todo tipo de música. “Yo creo que hay que renovarse o morir”, dice, y añade que uno nunca termina de aprender: “El día que dejas de aprender, sonaste. Al final, aprendes que el único amor incondicional que tú puedes dar es a tu piano y a tu música”.
Y es aquí donde descansa la pasión del maestro. En su piano que le ha permitido sanarse, un instrumento que es su amigo, su “confesor” como lo definía Franz Liszt. “Si me preguntan, usted, ¿medita? Digo, no, toco el piano. Usted, ¿reza? No, toco el piano. ¿Se ha hecho terapia con un psicoanalista? No, toco el piano. Todo sale de ahí, la energía fluye y te cura los dolores”.
Para los momentos difíciles, cuando duele el alma, Roberto Bravo recomienda escuchar a Bach. Y, para seguir adelante, entregarse derechamente a tu pasión, donde sea, para quien quiera o necesite escuchar. Desde el Carnegie Hall de Nueva York o en el gimnasio de una escuela.
“Lo que el alma hace por su cuerpo es lo que el artista hace por su pueblo”. Lo decía Gabriela Mistral y lo recuerda Roberto Bravo en esta entrevista que está hecha para los amantes de la música. Y para los que viven pensando en los otros y siempre conducidos por su pasión…