Editorial de Freddy Stock, viernes 12 de diciembre.
La marcha de los bastones… Así se llama la movilización que un grupo de adultos mayores realizará mañana en el Centro de la capital. A partir de las 11 y desde el Parque Almagro, nuestros abuelos, los chilenos que le entregaron toda su vida al trabajo y a la sociedad, marcharán para presionar al Gobierno por un derecho que parece básico, una perogrullada como es una tarifa diferenciada en el sistema de transporte público.
Es una medida que parece básica pero que al no existir demuestra el completo desprecio que este país pareciera tener para aquellos que ya lo entregaron todo. Un adulto mayor, por ejemplo, gasta el 10% de su jubilación si sale tres veces a la semana de su casa. Claro, en Chile, nuestros jubilados están recibiendo, en promedio, unos 190 mil pesos cada mes, cifra que los convierte en el nuevo segmento de pobreza del Chile moderno.
“La marcha de los bastones” es una protesta justa. Es una petición de aquellos que son discriminados por un sistema social que les hace imposible la salud, la vivienda o el transporte. Los adultos mayores están condenados a vivir de las limosnas de parientes, de vender sus casas porque no pueden pagarle al fisco las contribuciones o de tener que encerrarse en sus casas para no gastar su dinero en las micros.
“La marcha de los bastones” es más que una manifestación de adultos mayores, es un llamado de atención que nos debiera llenar de vergüenza por el trato que le estamos dando a esos chilenos que nos dieron todo… Chilenos que algún día también seremos nosotros…