El baterista de AC/DC está alejado de la actividad de la banda por el juicio en su contra por cargos de amenazas de muerte y posesión de droga.
El baterista de AC/DC, Phil Rudd, que en estos momentos está alejado de la actividad de la banda por un juicio en su contra por cargos de amenazas de muerte y posesión de drogas, habló públicamente por primera vez desde su arresto. Lo hizo en conversación con el medio ONE News, estimando que dichos cargos son “ridículos”.
“Esto ha sido un gran pedazo de queso y todas las ratas están sacando su parte. Así es la vida, pero no es lo que soy yo”, manifestó, agregando: “Voy a volver a trabajar con AC/DC. No me importa a quien le guste y a quien no (…) quiero mi trabajo de vuelta y quiero mi reputación de vuelta”.
Por último, aseveró que “todos escuchan a la gente equivocada. Deberían escucharme a mí. Soy un buen tipo, y un muy buen baterista, por cierto. Pregúntale a Angus (Young), él te dirá”.
Rudd fue arrestado el 6 de noviembre en Nueva Zelanda y el cargo más grave era el de haber planeado un homicidio, supuestamente negociando con un sicario para acabar con la vida de dos personas. Fue desestimado por falta de pruebas y el músico fue liberado horas después.
Recientemente, un hombre del que se ha mantenido su nombre en reserva afirmó ser el supuesto “sicario” de toda esta historia, y dijo que el baterista se le acercó para ofrecerle ser su guardaespalda, no para matar a nadie. Por ese trabajo le habría ofrecido 200 mil dólares y un auto. Según el hombre, Rudd es un “buen muchacho” y todo el incidente se ha salido de sus proporciones.
Por mientras, sigue en curso el juicio por los otros dos cargos: posesión de cannabis y metanfetaminas, y presuntas amenazas de muerte a un contratista, proferidas en una conversación telefónica.
Rudd debe volver a presentarse en la corte el 10 de febrero y en todo este período AC/DC ya sacó su disco nuevo “Rock or bust” y empieza a dar forma a su nueva gira mundial, sin claridad de si estará el baterista titular en algún momento.