Escucha el programa a continuación…
BLOQUE 1
Cruisin’ For A Love (J. Geils Band)
En un New Hampshire de temprana americanidad, de tiendas rosadas, rubias de cereza y cuartetos de barberías, llegaron los ancestros. Desde Quebec, de la sección francesa de Nashua, Leo, el reportero de periódico el Type Center, conoció a Gabrielle, la obrera huérfana de una fábrica de zapatos. Se casaron, cruzaron 14 millas a través del río Merrimac, y llegaron a un pueblo Lowell, Massachusetts, se establecieron y nacieron tres hijos, Gerard, Caroline y John. John, que después pasaría a conocerse como Jack, nació en el piso de arriba de una casa pareada el 12 de marzo de 1922, a las 5 de la tarde. Su infancia en Desolation Peak, con montes nevados, la recordó en su libro “Desolation Blues”. Jack devoraría, amaría y pondría nuevos límites al lenguaje llamado inglés, uno que no hablaría hasta que recién tuviese cinco años, después del que describe como uno de los más importantes de su vida en el pasado: la muerte de su hermano mayor Gerard, debido a una fiebre reumática, que lo dejó prácticamente inválido gran parte de su corta vida. Su amor idealista por su hermano tenía una dimensión religiosa: se consideraba un poseído por el espíritu de Gerard, quien llevaba niños hambrientos, le hablaba a los pájaros en la ventana como San Francisco de Asís, liberaba ratones de sus trampas. Y cuando los estantes de la casa se movían sin ninguna razón por la casa, se ponía a hablar con los espíritus bajo ellos, Jack nunca pudo soportar la idea de que había traicionado a Dios por no haber muerto en lugar de Gerard. Pero ese no era su destino. Su tío Joe le dijo que estaba destinado a ser un hombre de gran tristeza y talento. No se le ayudaría ni a vivir ni a morir, sino que sufriría como los otros, y quizás más. En séptimo grado, estaba en clase de inglés y su mundo se abrió leyendo a Mark Twain, Jack London, Thomas Wolf, Ernest Hemminghway y Walt Withman. Siempre le encantó el football, pero se convertiría en un escritor. Con una imaginación llena de aventura y hambre por escapar de su tejado lleno de verde y putrefacción, mostró sus primeros intentos como novelista a los 11 años, describiendo su infancia como nadie. El poder inspirador que te mueve de una infancia gris y te lleva a un viaje inolvidable se puede encontrar en todo lo que escribió por los siguientes 25 años. Su necesidad desesperada de escapar combinada con una compulsión de confesar y comunicar momentos extraños en la vida, mientras se bebe en el camino, con la muerte esperando a tu lado, crearía un arte que liberaría a la cultura de occidente. Jack Kerouac logró nada menos que cambiar nuestras conciencias para siempre.
Route 66 (Live) (Rolling Stones)
Have Love Will Travel (Sonics)
It’ll Be Alright (Bullet Proof Lovers)
(I’m A) Roadrunner (Junior Walker & his Allstars)
Dead Man’s Curve (Jan & Dean)
BLOQUE 2
Bienvenidos a nuestra celebración a Jack White, nacido como Jean-Louis Lebris de Kérouac. Sí, los 50 se tratan de la conformidad. ¿Qué debía sentir un ciudadano común de los Estados Unidos? Gratitud. Porque ganamos la Segunda Guerra mundial, porque habíamos inventado los suburbios, donde todos podíamos tener una casa, porque recién habíamos inventado el crédito, y podíamos tener un auto o incluso dos. Había dinero, había algo de paz, había seguridad… éramos número uno. Así que inventamos la Clase Media y ¿qué más? Les daremos a Elvis para mantener a sus hijos felices, ¿qué dicen? Dentro de toda esta gratitud aparecen tipos como Allen Ginsberg y Williams Burroughs, y ellos no sienten gratitud. De hecho, eran problemáticos por naturaleza. Su futuro amigo Jack Kerouac llega a la Universidad de Columbia con una beca de football y le atrae la sensibilidad bohemia y las ganas encontrar una nueva filosofía que tenían Allen y William. Los tres tenían cosas en común: habían nacido desilusionados, por tres diferentes razones y compartían una desconfianza al paquete de vida que te ofrecía la sociedad. Fue Kerouac que sugirió la posibilidad radical de, simplemente, abandonar todo. Sin importar obligaciones, responsabilidades ni culpas que te daba la sociedad, volar lo más lejos posible de todo eso. Había nacido la generación Beat. Juntos encarnarían todo lo que caracterizó a los 60 y 15 años después, como el budismo, la meditación y todo lo relacionado con la filosofía oriental, los derechos civiles, las drogas de todo tipo, el sexo de todo tipo, el arte autobiográfico, el rechazo al materialismo y a las convenciones del tiempo y del espacio. “Howl” de Ginsberg y “Naked Lunch” de Burroughs completarían la trilogía del nuevo estilo, pero “On The Road” de Kerouac llegaría a un público más amplio, y por primera vez, una nueva generación experimentaría la revelación de posibilidades ilimitadas.
Ramblin’ Gamblin’ Man (Bob Seger System)
Electric Man (Rival Sons)
Drive My Car (Beatles)
Cherry Cherry Coupe (Beach Boys)
BLOQUE 3
Todo se refiere al ritmo (beat). Es la Generación Beat. Es BEAT. Es mantener el beat. Son los beats del corazón. Es ser golpeado (beat down). La cultura Beat es el circo avant garde compuesto de proxenetas, prostitutas vagabundos, charlatanes, intérpretes de be-bop jazz, valores de bandidos, todo eso mezclado en la misteriosa labor de hacer arte, como el arte de la vida. Y a propósito de freaks, desadaptados y forajidos, muy en medio de nuestro país hay una tradición llamada outlaw country; y de esa vertiente existe un renegado llamado Mojo Nixon (que no tiene relación con el presidente, claro), a quien escuchamos a continuación con lo que siente por Jack Kerouac…
Jenny Take A Ride (Mitch Ryder & the Detroit Wheels)
Down On The Boulevard (Pop)
Don’t Let Him (Love Me Nots)
Ride (Dee Dee Sharp)
Highway Chile (Jimi Hendrix Experience)
BLOQUE 4
Bienvenidos de vuelta al Underground Garage festejando a Jack Kerouac, donde sí hacemos swing semanalmente. En un remate en Indianapolis, alguien pagó 2.43 millones de dólares por el rollo de 37 metros en el que Kerouac escribió “On The Road en 20 días consecutivos, entre el 2 y el 22 de abril de 1951. No tenía párrafos y estaba redactado en su particular estilo, de forma libre. Estaba escrito en primera persona y de forma descarnada, honesta e intensa. Todos esos elementos dieron forma a uno de los libros de más influencia en el siglo XX. Y nuestro tema cool de la semana llega desde Los Angeles. Recibimos de vuelta en el Underground Garage a Prima Donna.
Deathless (Prima Donna)
Locomotion (Little Eva)
(I Live For) Cars & Girls (Dictators)
Rocket 88 (Jackie Brenston and his Delta Cats)
BLOQUE 5
Bienvenidos de vuelta al Underground Garage en nuestra celebración a Jack Kerouac. Y en “On The Road” dijo: “La única gente que me interesa es la que está loca, la gente que está loca por vivir, loca por hablar, loca por salvarse, con ganas de todo al mismo tiempo, la gente que nunca bosteza ni habla de lugares comunes, sino que arde, arde como fabulosos cohetes amarillos explotando igual que arañas entre las estrellas”. Perdimos a Jack Kerouac el 21 de octubre de 1969 en St. Petersburg, Florida. No volveríamos a ver a nadie igual desde entonces. Consíganse “On The Road”, léanlo por primera vez, o vuélvanlo a leer. En un mundo en el que nos distraemos por las tonteras más irrelevantes, mientras nuestra cultura se ahoga en la mediocridad, se sorprenderían lo estimulante que “On the Road2w sigue siendo.
Highway 61 Revisited (Bob Dylan)
Six Days On The Road (Taj Mahal)
Don’t Let Me Down (Dogs)
Go Lil’ Camaro Go (Ramones)
Trucking Man (Moby Grape)