Platas desperdiciadas… Somos un país pobre pero, al parecer, bueno para tirar lo poco que tenemos al tarro de la basura, eso pensando que nadie se llevó algo para la casa. Dos ejemplos que se destaparon hoy encienden luces de alerta al respecto y ambos fueron entregados por la Contraloría General de la República.
En el primero, la Contraloría detectó irregularidades en el aumento de presupuesto por más de 1.800 millones de pesos a la empresa Azvi Chile, que desde 2011 tenía a cargo la construcción del puente Cau Cau, el primero de modalidad basculante del país que se esperaba inaugurar el pasado 4 de abril en Valdivia.
Los recursos extras entregados a Azvi, buscaban financiar obras extraordinarias que requería el proyecto y fueron autorizados por el Ministerio de Obras Públicas. Hasta el día de hoy, el puente no se puede utilizar como fue proyectado.
El segundo caso tiene que ver con el que fuera llamado con tanta pompa y soberbia como el “mejor censo de la historia” declarado hoy como “ilegal” por la Contraloría luego de un requerimiento presentado por diputados de la Democracia Cristiana.
Según indica el informe, “el Instituto Nacional de Estadísticas realizó el levantamiento censal sin considerar las recomendaciones internacionales en la materia, no obstante estar obligado a ello”. Además, tampoco recibieron las recomendaciones de los expertos y asesores respecto del cambio
metodológico. En resumen, todo quedó en la basura y en la ilegalidad… Ejemplos para seguir poniéndonos rojos de rabia o de vergüenza y a la espera de que, alguna vez, se conozcan los responsables de tales despilfarros…