Editorial de Freddy Stock, lunes 23 de noviembre.
¿Hasta dónde caerá el fútbol chileno?… Es curioso pero la historia dice que estamos encaramados en lo más alto que hemos llegado del ránking de la FIFA, en un sorprendente e inédito quinto lugar. Pero, a la par, jamás nuestro fútbol había llegado a lo más profundo de un escándalo judicial, una intriga de corrupción también inédita que tiene al renunciado presidente de la ANFP, Sergio Jadue, declarando como culpable de coimas en Estados Unidos.
En la cima y en las cloacas, con la gloria alcanzada en las canchas y la podredumbre conseguida en pasillos y oficinas. Y, ahora, el ex árbitro Carlos Chandía puso otra cuota de lodo en esta trama al acusar presiones de Sergio Jadue para perjudicar a Everton y Wanderers en su condición de presidente de la Comisión de Árbitros.
«Él me dijo que ‘ellos eran amigos míos y hoy ya no. Usted vea cómo lo hace’. Yo renuncié, pero ese fin de semana coincidentemente perdieron Everton y Wanderers», dijo Carlos Chandía en su grave acusación sobre la manera en que manejaba su poder Sergio Jadue. De esta forma, el manto de dudas ya no está sólo en los balances de la ANFP sino en algo más importante para el fútbol: la sospecha cae en las canchas donde habitan los sueños del hincha, esa magia que convierte al fútbol en una pasión que hechiza a multitudes…