Butch Vig, productor a cargo de «Nevermind» de Nirvana, recordó los días de sesiones de grabación del clásico disco y los cambios de humor que tenía Kurt Cobain.
«Había momentos que eran sencillamente duros. A veces, Kurt tenía cambios de humor muy rudos y no se podía contar con él. Se quedaba sentado en una esquina y se perdía en su propio espacio», cuenta Vig en entrevista a Billboard.
«Krist Novoselic podría defenderlo diciéndonos al resto que había que dejar a Kurt que se le pasara nomás, así que nos ocupábamos en otras cosas por un par de horas, veíamos baterías y bajos. Y de repente, Kurt volvía en sí, tomaba la guitarra y nos indicaba que siguiéramos. Volvía con el máximo del compromiso. Así que aprendí a lidiar con su ánimo cambiante para manejar los tiempos del estudio y hacer todas las tomas», agrega el productor.