Dos compatriotas, de esos que hay cada vez menos, estaban de vacaciones en el exclusivo balneario de Punta de Este en Uruguay cuando las noticias alertaban de la llegada de un tornado en la pequeña ciudad de Dolores, ubicada en el departamento de Soriano a 236 kilómetros de Montevideo y a 340 kilómetros de Punta del Este.
Sin pensarlo dos veces, los chilenos tomaron sus cosas, se despidieron de Punta del Este y partieron con rumbo a Dolores con el único objetivo de ayudar a los damnificados del tornado que dejó un total de 5 muertos, 30 heridos y un importante número de habitantes y casa afectadas.
¿Cómo llegaron hasta Dolores?
Pese al mal tiempo y las dificultades, los chilenos oriundos de Chillán, se transportaron en bus y haciendo dedo donde una ambulancia de la vecina ciudad de Mercedes les dio el último aventón para llegar hasta a la zona cero y ponerse a disposición de los organismos de ayuda para contribuir en restablecimiento de la normalidad en la ciudad. “Sufrimos el terremoto en carne propia el 2010 y este tipo de cosas nos sensibilizan mucho”, dijo uno de nuestros silenciosos y anónimos héroes al momento de ser entrevistados por la televisión local.
Eso… es ¡ACTITUD FUTURO!