Un papelón… eso estamos haciendo a nivel internacional con la Copa Davis que debía inaugurarse esta mañana contra Colombia, pero que debió suspenderse por el mal estado de la cancha en Iquique.
El árbitro del certamen, junto a los dos capitanes de los equipos, tomaron la decisión que significó para Marcelo Ríos, la vergüenza “más grande de su vida” según publicó en su cuenta de Twitter. «He vivido la vergüenza más grande de mi vida como tenista. No tenemos una cancha apta para disputar la Davis», escribió en su perfil el que fuera el primer número uno del mundo de habla hispana en la historia del tenis.
Es una vergüenza, pero también una profunda tristeza constatar el grado de decadencia de un deporte que nos dio este número uno y tres medallas olímpicas de oro. Con dirigentes que no han sabido aprovechar las capacidades de Ríos, Massú y González en la formación de nuevos valores o, al menos, tener una cancha decente donde jugar una serie más bien menor de la Copa Davis… Bienvenidos a Palabras sacan Palabras…