En conversación con Entertainment Weekly, Will Smith se explayó sobre sus elecciones a la hora de encaminar su carrera. En concreto, sobre su 2016, en el que estrenó «Suicide Squad», uno de los productos más exitosos del año, y el cual le dio la bienvenida al Universo Expandido de DC.
Pero para hacer de Deadshot, el taquillero actor tuvo que rechazar otro proyecto, muy relacionado a su nombre, como la secuela de Día de la Independencia.
La razón para elegir una y no otra es muy clara, como lo explica el mismo actor: «Tenía los guiones de estas dos películas, y una decisión que tomar. No podía hacer ambas por cuestiones de calendario. Frente a una posibilidad de ir hacia adelante, quedarme con algo del pasado me parecía incorrecto. Todo el tiempo me mentalizo en seguir adelante, y conseguir nuevos desafíos»
Mal no le fue a Smith con su decisión. Por más que «Suicide Squad» haya recibido críticas dispares, no se comparan ni por asomo a lo que fue «Día de la Independencia: Contraataque». Eso, sin nombrar que la película de los villanos de DC Comics recaudó casi 800 millones alrededor del mundo.