Viggo Mortensen, nacido en Estados Unidos y con ascendencia danesa, vivió hasta los once años en Argentina. Gracias a los negocios de su padre, pasó su infancia entre ese país y Venezuela y aprendió español. Pero fue la cultura rioplatense la que se quedó con él: el acento y sobre todo su pasión por el fútbol.
Por eso no extrañó que, durante su paso por la alfombra roja de los premios Oscar, aprovechara la primera oportunidad que tuvo para demostrar su fanatismo por San Lorenzo de Almagro.
Cuando un periodista alemán le preguntó por su fanatismo por el fútbol, el actor, nominado por su papel en «Capitán Fantástico», sacó del bolsillo una insignia de San Lorenzo y dijo: «San Lorenzo de Almagro… De Boedo, Argentina… Vamo’ a ser campeones».