Se cumplieron los 100 días de la presidencia de Donald Trump y lo que se puede concluir es que tiene una forma bastante particular de gobernar. Incluso esto motivó artículos de prestigiosos medios en los que se hace referencia a las peculiaridades que el magnate ha impuesto en la Casa Blanca.
Entre ellos hay uno en especial que ha llamado la atención mundial: el botón rojo de su escritorio en el Despacho Oval. No fue hasta que Amy Ficus, editora del New York Times, reconoció el detalle para que explotara en las redes sociales, consigna Infobae.
«Trump tiene un botón en su escritorio que puede presionar y un mayordomo le trae una Coca-Cola», escribió la editora en Twitter.
Con Trump como presidente, el botón rojo no responde a una función de suma urgencia, de alcance mundial, ni siquiera nacional. Más bien, tiene que ver con un gusto banal. El mismo mandatario ha reconocido que es un devoto de las gaseosas y la comida rápida, y por lo mismo, decidió moldear el Despacho Oval de acuerdo a sus necesidades.
Dos meses antes, el 28 de enero, la periodista de la CNN Kate Bennett compartió una foto en la oficina presidencial en la que se muestra a Trump con un vaso de gaseosa al lado. «Algo nunca visto durante la administración previa. Gaseosa en el escritorio Resolute», escribió.
El escritorio Resolute data de 1880 cuando la Reina Victoria se lo regaló en símbolo de amistad al presidente Rutherford Hayes. Seguramente, nunca imaginaron que el bello mueble terminaría teniendo un botón rojo con una función tan banal.