El solemne traslado de la cuenta pública al jueves 1 de junio llenó de invitados de honor el Congreso de la República. Sin embargo, entre ellos apareció un perrito negro que intentó capear el invernal frío porteño en la alfombra roja instalada en el frontis del edificio.
Ante la posibilidad de que el canino pudiera interrumpir la cuenta pública, aparecieron en escena dos guardias para desalojarlo.
A pesar de que el animal no estaba muy de acuerdo, dedujo que estaba en desventaja numérica y optó por no oponer mayor resistencia, saliendo tranquilamente entre las rejas que cercan el perímetro, según reporta ADN.
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