La juventud es una etapa de muchos cambios, pero también donde la diversión y las fiestas forman parte de la vida de varios. La universidad y las nuevas amistades son la excusa perfecta para organizar salidas a bares, reuniones en casa o fiestas en discotecas hasta altas horas de la madrugada.
Lamentablemente las cosas no siempre terminan como uno quiere. La juerga pasa la cuenta y el exceso de alcohol acaba con noches increíbles en lugares inesperados. Últimamente hemos visto varios casos de jóvenes desorientados que incluso protagonizan fatales desenlaces producto del alcohol y las drogas. Sin embargo, algunos casos son anecdóticos y se convierten en historias para contar. Éste es el caso de Reece Park.
Según cuenta RT, el joven australiano bebió más de la cuenta y decidió trasladarse a su casa en taxi. El chofer del vehículo se percató del deplorable estado del joven, por lo que llamó a la Policía con el objetivo de solicitar ayuda para dejar a Park en su domicilio. Natalie Siggins y Jeremy Blyth, de la ciudad de Launceston, atendieron el llamado y colaboraron con el joven.
Los policías lograron «adivinar» la dirección del hogar de Park y lo trasladaron hasta el lugar. Lo curioso es que los efectivos lo dejaron ¡en su propio dormitorio! Lo que no sabía el joven es que Siggins y Blyth tomaron una particular «selfie» para graficar el estado de la situación.
Al día siguiente Park se enteró de la fotografía y agradeció a los policías. «Menudas leyendas», señaló en su red social.