Facebook deberá pagar 1,2 millones de euros por vulnerar la ley de protección de datos que rige en España. Según dictaminó la justicia de ese país, la compañía recopila, almacena y usa información con fines publicitarios sin el consentimiento de los usuarios.
De acuerdo con la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD), se reúne información sobre gustos personales, navegación, creencias, ideología y género por medio del uso de servicio e incluso a través de páginas de tercero, sin tener un consentimiento «inequívoco, específico e informado» de los usuarios para recopilar y utilizar esa información.
Según las investigaciones realizadas, se constató que la red social utiliza datos «especialmente protegidos» con fines de publicidad sin la correspondiente aprobación y esto constituye una infracción muy grave a la ley de Protección de Datos. Además, se confirmó que los usuarios no son informados sobre el empleo de cookies que permite recabar información cuando activan la opción «me gusta», cuando navegan por la plataforma o cuando visitan las páginas de terceros incluso sin haber iniciado sesión en Facebook.
Por esto, se llegó a la conclusión de que el sitio sólo hace referencia a sus acciones de forma poco precisa y que para poder entender exactamente cómo es la política de privacidad de la plataforma hay que acceder a varios links, con información y datos que un usuario promedio (sin conocimientos avanzados) no podría captar del todo.