Yoko Ono presionó a una empresa de refrescos de origen polaco para que cambiara el nombre de su nueva bebida, «John Lemon», la que, según la artista y a su equipo legal, infringe la marca registrada de su difunto esposo, John Lennon.
La compañía lanzó al mercado esta bebida vegana y sin gluten en 2012 y en su marketing utilizaba claras alusiones al músico con frases como “Let it Be”, pese a que ellos negaban la vulneración de propiedad. Por esto, ahora han tenido que cambiar su nombre por “On Lemon” debido a las amenazas de emprender acciones legales por parte de la mujer del ex Beatle.
Según The Guardian, los abogados de la compositora le habían informaron a la marca que si continuaban usando el nombre de “John Lemon” tendrían que pagar una multa de 5 mil euros por día y 500 por cada botella vendida.