Ni el momento en el que Darth Vader le corta la mano, ni la muerte de tío Owen y Tia Beru, ni ese día en el que casi es devorado por un rancor. Mark Hamill tiene muy claro cuál fue el momento más horrible para él de toda la saga de «Star Wars»: sucedió en el Episodio V,»The Emprie Strikes Back» de 1980, y tiene que ver con el maltrato a los animales.
El momento más traumático para el actor que da vida a Luke Skywalker no es otro que la lucha contra el Wampa en la cueva helada de Hoth. Cuando rodó esa escena, Hamill recibió instrucciones de que balanceara furiosamente el sable láser frente a la cámara (el monstruo no estaba a su lado en las escenas que el rodó. Se añadió después jugando con los planos).
El guión no era muy específico al respecto, así que Hamill creyó que Luke sencillamente ahuyentaba al monstruo con la luz de su arma hasta poder soltarse y escapar. Cuando vio la escena final se encontró con la desagradable y sangrienta sorpresa de que su personaje cercena el brazo del wampa. Recientemente, se refirió al episodio con su particular humor después de que unos fans le enseñaran una torta con forma de brazo seccionado.
Hamill explica que el wampa no era malvado, tan solo tenía hambre, y que cortarle el brazo le pareció una crueldad innecesaria e indigna de su personaje.
No es la primera vez que Hamill se posiciona en contra de este tipo de escenas. El actor es un gran amante de los animales y participa en diversas asociaciones para su protección. En ese sentido, Hoth fue una auténtica mala experiencia para el actor. Hace unos meses, confesaba que el juguete de Luke que más odia de todos los que se han fabricado en la historia de Star Wars es el set en el que sale de las entrañas del tauntaun.