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¿Qué hace que “I Won’t Back Down” sea una buena canción?

Hector Muñoz |

El productor estadounidense, Rick Beato, desmenuza el tema con la sesión original.

Revisa los análisis que Beato ha hecho con canciones de The Police y Pearl Jam.

Tom Petty publicó “I Won’t Back Down” como parte del Full Moon Fever (1989). El tema lo compuso él mismo junto a Jeff Lynne, quien además colaboró en la producción del disco. En el tema tocaron George Harrison, Mike Campbell y Phil Jones, además de Petty y Lynne. Y recientemente la canción hizo ruido por la similitud que “Stay With Me” (2015), de Sam Smith, guardaba con ella. Actualmente Petty y Jeff Lynne son co-compositores del tema y reciben parte de sus ganancias.


El tema parte con un guitarra slide, cortesía del eterno guitarrista de Tom Petty & The Heartbreakers. Eso ya te engancha de inmediato. Sobre esta primera parte del tema, el productor estadounidense, Rick Beato, especifica: «tienes guitarras eléctricas muteadas. La del canal izquierdo está más distorsionada que la otra, y cuando las tocas juntas le da amplitud a la mezcla por la diferencia en los timbres».

Y no sólo las guitarras van muteadas marcando la corchea, sino que también el bajo. Además, hay un pad que toca el teclado y que «le da pegamento a todo el verso para que éste se pueda sostener», indica Beato.


«El hi-hat está programado, es prácticamente un metrónomo. Y luego grabaron encima los platillos, que son reales. La caja también la tocan sola en una habitación, al igual que los toms. El bombo, por último, también pareciera ser programado», analizó el productor.

Es probable que sea así porque no hay bleed en el bombo ni en el hi-hat, ni tampoco se siente que le hayan aplicado un gate. No así con la caja y los platos, donde se puede sentir el lugar donde los tocaron.


El hecho de que la guitarra vayan junto con la voz es una de los principales elementos que enriquecen este tema. «La entrada al coro es en realidad lo que hace que esta canción sea buena. Es uno de los sellos de Tom Petty, que las guitarras con las voces vayan de la mano», dijo Beato.


La guitarra que va haciendo arpegios de un Sol abierto, choca con la guitarra que rasguea. «Se siente esta melancolía, producto de la cuarta suspendida contra la tercera (D sus4 add3). Esa disonancia aporta mucho al coro» especificó Rick Beato.

Sumado a esto, es importante destacar que las armonías vocales son increíbles. Sin ProTools, todo hecho con cintas… no hay nada como voces verdaderas e imperfectas.

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