El ingeniero Fernando Blanco se topó con la insólita escena cuando volvía a Santiago en la ruta 68.
“Quedé plop. Mi hijo de 13 años se puso a contar los colchones y eran como 12, más una lavadora y un refrigerador. Era insólito”. Así cuenta Fernando Blanco, cuando en la ruta 68 se topó con un furgón cargado hasta arriba.
Este ingeniero de 46 años iba de regreso a Santiago desde la Quinta Región cuando a la altura del peaje del túnel Lo Prado se encontró con la insólita escena.
Los expertos dicen que no es recomendable cargar de esa forma un automóvil, ya que además de exigir al auto, aumenta el riesgo de perder el control y provocar un accidente.
“Los autos se fabrican pensando en que la distribución del peso quede en una posición fija. Cada auto posee un centro de gravedad que es el punto (imaginario) donde se aplica la fuerza. Pero el peso arriba y en el costado del auto provoca que este centro se mueva y quede más arriba, por lo que será más fácil que se voltee debido al viento o al doblar en una curva”, dice a LUN Felipe Veloso, profesor de la Facultad de Física de la Universidad Católica.