El actor fue captado en la playa, sin camiseta, mientras se encontraba grabando su próxima película.
De manera posterior a que se filtraran un par de fotografías de Ben Affleck en la playa -luciendo un colorido tatuaje que cubre toda su espalda- la periodista Naomi Fry publicó una columna en The New Yorker, titulada «La gran tristeza de Ben Affleck».
En el texto, la autora se refirió a las fotografías y señaló que «su intestino se está yendo hacia afuera de una manera que, en un país más ilustrado como, por ejemplo, Francia, quizás se lo considere viril, no muy diferente al lujurioso Gérard Depardieu en su mejor momento, pero en Estados Unidos, que es físico y fascista, este se ve como un Homero Simpson», según indica el sitio E Online.
«Una toalla grisácea y azul envolvía su sección media protegiéndolo, evocando a un adolescente tímido en una piscina pública. Observando el agua frente a él, su mirada oscura y vacía, Affleck es un senador romano derrotado», agregó.
Muchos cibernautas se pronunciaron al respecto y se manifestaron en contra de las palabras de la mujer. Sumado a esto, la estrella de Hollywood no quedó indiferente y manifestó a través de su cuenta de Twitter: «Estoy bien. Piel gruesa reforzada por tatuajes chillones».
Finalmente, el artículo finaliza con la reflexión «la imagen sugiere no solo la caída de Affleck, sino también la caída del hombre. Hay algo sobre este padre agotado que induce pánico. Hemos estado viviendo en un mundo por Afflecks durante tanto tiempo. ¿Nos conoceremos siquiera cuando se hayan ido?».