Por Jorge I. Lagás
Un festival atípico tendrá lugar del 18 al 20 de mayo en la Hacienda Picarquín, comuna de Mostazal: el Evil Confrontation Open Air, encuentro al aire libre de más de 20 bandas de metal, entre internacionales y chilenas, durante tres días, acompañado de varias actividades paralelas, con camping incluido.
El cartel exhibe bandas como Angel Witch, Demolition Hammer, Pagan Altar, Tribulation y Bölzer, pero de entre todas destaca Triptykon, la actual banda del vocalista, guitarrista y compositor Thomas Gabriel Fischer, conocido también como Tom G. Warrior. El mismísimo líder de los legendarios Celtic Frost, una de las bandas que más marcó el desarrollo de la historia del metal desde los 80 en adelante.
Tom Warrior puso a Suiza en el mapa del metal cuando a principios de esa década formó Hellhammer, hasta ese entonces la banda más extrema que había pisado la faz de la Tierra. Su continuación natural fue Celtic Frost, una entidad que empujó cualquier límite conocido en el metal y es citada como influencia directa por prácticamente cualquier banda importante en el death, thrash, black y doom metal.
Celtic Frost ya no existe, pero Tom Warrior continúa esparciendo sus oscuras creaciones en Triptykon, banda que formó hace 10 años y tal como pasó en el tránsito de Hellhammer a Celtic Frost, esta es también una continuación natural de lo que venía haciendo. Tienen dos discos y un EP y han sido aclamados por la crítica y el respetable público. En esta primera vez en Chile, traen un set especial de canciones de Celtic Frost, un momento que los seguidores chilenos han esperado desde los tiempos del Manuel Plaza y el Paseo Las Palmas.
Con tanta historia a cuestas, nos comunicamos con Tom Warrior. He aquí sus palabras:
-Tom, es un honor. ¿Cuáles son tus primeras impresiones al venir a tocar por primera vez a este lado del mundo?
-Me siento exactamente igual que siempre cuando tocamos en cualquier parte. Cada concierto es algo especial para nosotros, algo para lo que nos preparamos muy cuidadosamente y no hay un territorio en el mundo en que los fans sean menos importantes que en otros. Valoramos extremadamente a nuestro público y tratamos de llenar sus expectativas tan perfectamente sea posible, ya sea en Chile, Suiza o Francia o donde sea.
-¿En qué están en este momento con Triptykon? ¿Hay planes para nuevo material?
-Estamos trabajando en nuevo álbum. Eso estamos haciendo ahora. Puedes esperar exactamente lo mismo que escuchaste en los dos primeros álbumes. Material producido muy profesionalmente, muy oscuro, muy pesado, sin límites artísticos. Eso hacemos. Nada cambiará.
-¿En qué medida dirías que está presente el espíritu de Celtic Frost en lo que hace Triptykon?
-El espíritu de Celtic Frost está presente en toda forma, en todo nivel, en lo que hacemos, por eso formé Triptykon. La única diferencia es que ahora no hay mentiras, no hay peleas de egos de machos movidos por la testosterona, eso es lo que destruyó a Celtic Frost y realmente no quería seguir con algo así en Triptykon. Pero artística y musicalmente, todo es exactamente lo mismo. Seguimos los mismos patrones. Formé Triptykon para ser lo más cercano posible a Celtic Frost.
-¿Dirías que el espectro de estilos que influyen y que se expresan en la música de Triptykon es mayor que el que tenía Celtic Frost?
-¿Cómo podría ser eso posible? Nombra otra banda en la escena del metal que tenga un horizonte musical más amplio que Celtic Frost. Incorporamos música clásica, metal, jazz, new wave, NWOBHM, ¿cómo podrías decir que se puede ser más amplio que eso? Celtic Frost fue el prototipo para Triptykon y diría que no hay otra banda en la historia del metal moderno que haya incorporado tantas influencias en un solo proyecto. Triptykon continúa eso porque yo hacía las canciones en las dos etapas.
-Tal vez el resultado de eso es que nunca se han repetido a sí mismos.
-No estamos hablando de Slayer. Que cuando escuchas una canción ya sabes cómo serán todas. Sean buenas o no, no hace diferencia. Todo es lo mismo desde el inicio del álbum hasta el final. Nunca hice un álbum así, en mis 36 años de carrera.
-¿Qué tan importante es buscar influencias e inspiraciones que vayan más allá del metal? Incluso cuando el resultado final sea netamente metal.
-Solía ser importante, cuando empezamos con Hellhammer y Celtic Frost en la primera mitad de los 80. Ahí la escena era muy restringida. Afortunadamente ya no es el caso, ahora es todo más abierto. Creo que incorporar otros tipos de música en tu vida privada es extremadamente importante. Es complejo, porque si hablas de inspiración, eso te pasa cuando eres niño y te enfrentas a la música por primera vez. Eso te inspira para toda la vida, determina cómo vas a percibir la música. Si ahora escucho algo diferente, por ejemplo un disco de música clásica, no voy a escribir una canción así al día siguiente. Mi personalidad ya ha sido forjada y tengo mi propio estilo, pero en general es importante para tus horizontes personales ser abierto en este sentido. La música es arte y el arte no es restringido.
-Ya que hablamos de influencias e inspiraciones, ¿cuál crees que es la clave que hizo que Hellhammer y Celtic Frost resultaran tan influyentes para los estilos extremos que se desarrollaron a partir de ahí, como el black y el death metal?
-No pienso en eso, la verdad. Nunca he ido por ahí pensando que mi música es importante, es absurdo. Soy simplemente alguien muy apasionado por la música, pero no creo que lo que hice o que yo mismo sea muy importante, eso sería vergonzoso. Así como veo a otros músicos que están convencidos de que son muy importantes. Eso me enferma. Sólo trato de que el próximo álbum que haga sea lo mejor posible, pero no pienso en bandas que hayan sido influenciadas por mí, me parecería absurdo.
-Hace poco más de 6 meses todos lamentamos el fallecimiento de Martin Eric Ain, tu compañero bajista en Celtic Frost y Hellhammer, tu gran socio en estas aventuras. ¿Cuáles son tus sentimientos ante esta pérdida?
-Nunca superaré su muerte, mientras viva. Martin Eric Ain y yo éramos extremadamente importantes el uno para el otro. Creo que ninguno de nosotros hubiera podido tener la vida que tuvo sin el otro. Era mi partner creativo, incluso después de Celtic Frost, cada canción que hice en Triptykon la hice con el conocimiento de Martin. Lo hacía escuchar todo. Me hizo tratar de poner una vara muy alta de calidad en mi composición, mi producción y mi ejecución. Era un compañero muy crítico, siempre me medí en torno a sus parámetros. Y creo que él sentía lo mismo por mí. Teníamos una relación compleja, pero al final del día, se volvió algo muy creativo y estoy muy orgulloso de eso.
-A propósito de figuras que han partido, una parte importante de Triptykon es el arte visual de los discos hechos por H.R. Giger, con quien has trabajado desde los tiempos de Celtic Frost en los 80. Él falleció en 2014, y como me contabas que viene uno nuevo, ¿cómo lo harán en ese aspecto? ¿Quién hará el arte si no está Giger?
-El próximo álbum de Triptykon ya está diseñado, desde la portada hasta el booklet interior. Será la última portada que dejó Giger. Esto se hizo alrededor del 2012, afortunadamente diseñamos el segundo y tercer disco al mismo tiempo. Por supuesto no sabíamos que moriría pronto. Así que el tercer álbum de Triptykon será histórico en ese sentido, tendrá la última portada oficial que dejó Giger. El álbum que venga después, el cuarto, lo trabajamos con un artista italiano. Ya está todo diseñado, lo que falta es grabarlo.
-Para la gente que nunca los ha visto, ¿cómo describirías un show de Triptykon?
-En Triptykon se trata todo de la música. No verás un show tipo Disneylandia, esto es una banda que va al escenario y dejamos que la música mueva el ambiente de todo lo que se genera. No tenemos ningún monstruo atravesando el escenario, ni explosiones ni ninguna de esas cosas. Todos pueden hacer lo que quieran, pero eso no es parte de Triptykon. Nos enfocamos en la pesadez y la oscuridad. Formé Hellhammer en 1982 por mi pasión por la música. Mi motivación, 36 años después, sigue siendo la misma. Voy al escenario como músico, no como un payaso o un showman. Para mí, la música es el factor crucial.
Para ver a Triptykon y las otras bandas del Evil Confrontation Festival, las entradas están disponibles por sistema Passline y todos los detalles de cómo llegar, cómo volver, los servicios del lugar, el cartel completo de bandas y todo lo necesario para asistir al festival, lo pueden revisar en el sitio oficial del evento, evilconfrontationfestival.cl.