En entrevista con la revista Rolling Stone el actor además contó detalles sobre su lucha contra la depresión, sus deudas y su tormentoso divorcio con Amber Heard.
Johnny Depp ha hecho un mito de sí mismo. Luego de la polémica por las fotos en que se veía muy desmejorado, ahora el actor de 55 años concedió una entrevista a la revista Rolling Stone, donde habló del infierno que ha vivido en los últimos años: cómo malgastó 650 millones de dólares, su lucha contra la depresión, sus deudas y su tormentoso divorcio con la actriz Amber Heard.
El actor contó de la «aguda depresión» en la que se vio sumido tras comprobar cómo se desmoronaba su vida amorosa y la financiera. «Caí hasta lo más bajo que se podía. El próximo paso era: ‘Vas a llegar a algún lado con los ojos abiertos y vas a salir de allí con ellos cerrados. No podía soportar el dolor en mi día a día», confesó.
Entre mayo de 2016 y febrero de 2017, la vida de Depp sufrió un vuelco por su divorcio de la actriz Amber Heard y las dificultades económicas en las que se vio inmerso por su mala gestión de su fortuna y la costosa ruptura de la que durante 15 meses fue su mujer, consigna 20 Minutos.
Depp no había escatimado esfuerzos en llevar una vida llena de lujos y eso le costó más de un disgusto. Fue demandado por un despacho de abogados por un préstamo impagado que usó para comprar un yate, decenas de coches de lujo, vino y aviones privados. A lo largo de 2017 se supo que había dilapidado una fortuna de más de 650 millones de dólares. «Mi hijo ha oído historias sobre cómo ese viejo ha perdido toda su pasta de boca de otros niños del colegio, y eso no es justo», dijo emocionado cuando le preguntaron por sus hijos, Jack y Lily Rose.
También se supo que había defraudado al fisco durante años con constantes impagos a la hacienda estadounidense, lo que le había supuesto importantes multas. Además se enfrentó a sus asesores, que le habían acusado de despilfarrador. «Decían que me gastaba 30.000 dólares al mes en vino. Es insultante decir que gastaba 30.000 dólares al mes en vino. Porque era mucho más», señaló entre risas.
Su terapia fue salir de gira con su grupo de rock y ponerse a escribir sus memorias, aunque admitió que eso también lo hundió. «Me empapaba en vodka por las mañanas y empezaba a escribir hasta que se me llenaban los ojos de lágrimas y ya no podía ver las páginas», reveló.
Sus memorias se inspiran en los textos que escribió en su día su amigo, el periodista Hunter S. Thompson, que se suicidó en febrero de 2005.