Editorial de Freddy Stock, martes 21 de agosto.
Estancados… El ministro de Desarrollo Social, Alfredo Moreno, dio a conocer los resultados de la encuesta Casen 2017 que reflejó que, por primera vez desde que se hace esta muestra bianual, se estancó la baja en la pobreza multidimensional, que llega a 20,7 por ciento, según la medición, mientras que en 2015 la cifra llegó a 20,9 por ciento. Es decir, no logramos bajarla como se venía haciendo. La tasa de pobreza multidimensional considera factores relevantes para la vida de las personas como son el acceso a la educación, salud, vivienda y entorno, trabajo y seguridad social y redes y cohesión social.
La explicación que dio el ministro Moreno apunta a un deterioro del mercado del trabajo, “que ha llevado –dijo- a que los resultados que tenemos en materia de distribución, primero, por ingresos, no hayan sido los que teníamos antes, sino que volver a una tasa que es la mitad de la que habíamos tenido con anterioridad y si queremos seguir bajando la pobreza tenemos que volver a crecer a los valores que teníamos antes».
Una cosa es crecer y, otra, distribuir lo que se gana al crecer y aquí tampoco son buenas las noticias. Porque dice la Casen que respecto de la distribución del ingreso hay un distanciamiento mayor entre lo que percibió el 20 por ciento más pobre con el 20 por ciento más rico. La pobreza estancada y la desigualdad que aumenta. Cifras que, para algunos, hace cuestionar el legado de la Presidenta Bachelet o, para otros, hace pensar que aún faltan mayores reformas estructurales para emparejar de mejor forma nuestra cancha social…