Los niños podrán seguir llevando sus teléfonos a los centros escolares pero no podrán hacer uso de ellos hasta que termine la el día.
El presidente de Francia, Emmanuel Macron, ha cumplido su palabra y, desde el comienzo del próximo curso escolar, los niños, de hasta 15 años, tendrán prohibido sacar el móvil utilizar el móvil durante el horario escolar, incluso durante los recreos.
Se trata de una polémica medida del ejecutivo francés que, el ministro de educación, Jean-Michel Blanquer, se trata de «un mensaje de salud pública para las familias», en declaraciones a RTL Radio.
«A veces, se necesita un móvil por razones relacionadas con la enseñanza. Sin embargo, su uso debe de estar controlado», destaca el ministro. «Es bueno que los niños no estén tan a menudo, o incluso nunca, delante de una pantalla con siete años de edad».
Esta nueva prohibición, que entrará en vigor en septiembre de 2018, no impide llevar los terminales a la escuela, aunque sí su empleo en cualquier parte del recinto escolar.