El propietario le dijo en varias oportunidades que se retirara, pero el sujeto continuó con su hostigamiento.
Se vio obligado a usar la violencia. Un padre de familia derribó de un solo golpe a un sujeto borracho que orinó su casa y lo peor de todo asustó a su hijo.
El individuo fue descubierto orinando en el jardín de la vivienda y cuando el propietario le pidió explicaciones, quiso iniciar una pelea.
Después de casi tres minutos lidiando con el borracho, el padre de familia perdió la paciencia y le dio un puñetazo en el rostro. Fue tan fuerte que el sujeto cayó inconsciente al piso y no se volvió a levantar.