Paradójicamente, había sido detenida por el robo de otro vehículo.
La Policía de Oklahoma (EE.UU.) ha publicado un video que muestra a una mujer que intentó escapar de un arresto robando el coche de Policía donde se encontraba esposada. Se da la circunstancia de que el motivo de la detención fue, precisamente, que se sospechaba que estaba conduciendo un auto robado, informó este martes el medio local Tulsa World.
Angie Frost, de 37 años, fue arrestada bajo sospecha de haber robado un automóvil en marzo de este año. El video del momento de la detención muestra que, a pesar de estar esposada y tener las manos detrás de la espalda, la mujer logró moverlas mientras los oficiales registraban el auto robado. Entonces ella se deslizó hasta el asiento del conductor del coche patrulla, encendió el motor y huyó.
Al darse cuenta de sus intenciones, un agente pregunta «¿Qué está haciendo?». Entonces el policía que tiene las llaves de la patrullera intenta abrir la puerta para impedir que Frost escape, pero ya es demasiado tarde y la mujer huye dando un acelerón.
Sin embargo, la mujer pronto abandonó el coche de policía e intentó huir a pie. Los agentes la atraparon y la llevaron a otro coche de patrulla. «Les dije que no robé ese auto», lloraba la fugitiva.
«Acaba de robar un coche de policía frente a tres oficiales», respondió uno de los agentes.
Antes de que la obligaran a entrar en el coche patrulla por primera vez, Frost insistía en que no sabía que el automóvil que conducía era robado y aseguraba que creía que era de un amigo. Además, la mujer se ofreció a colaborar con la Policía proporcionando información sobre drogas y otras actividades delictivas, y afirmó que ya estaba trabajando con detectives compartiendo información.
Frost fue acusada de robo de un automóvil, posesión de un vehículo robado, huida de un arresto, resistencia al arresto y conducción con una licencia caducada. La mujer fue declarada culpable de cuatro cargos en mayo y fue sentenciada a tres años de cárcel.