Esta creación les ayuda a los canes a superar el trauma que les genera este tipo de sonidos.
Las celebraciones de Navidad y Año Nuevo suelen tener un elemento que los perros odian: los fuegos artificiales. Y es que los espectáculos de luz y sonido resultan dolorosos para estas mascotas.
Los perros se asustan cuando escuchan fuegos artificiales, lo que también causa angustia a los propietarios y a sus familias. Una posible solución podría ser una caseta con sistema de cancelación de ruido que utilice tecnología similar a la que se encuentra en los automóviles y los auriculares para proteger los sensibles oídos caninos.
Una vez que los micrófonos dentro del prototipo detectan el sonido de los fuegos artificiales, un sistema de audio integrado emite frecuencias opuestas que anulan el ruido por completo, o al menos lo reducen significativamente, recoge ABC.
La idea se inspira en la tecnología de cancelación de ruido que Ford ha incluido en el Ford Edge, que ayuda a facilitar viajes más silenciosos para conductores y pasajeros. Cuando los micrófonos captan altos niveles de ruido del motor o de la transmisión, este se contrarresta mediante ondas sonoras opuestas del sistema de audio del automóvil.
El prototipo de perrera con supresión de ruido es la primera de una serie de iniciativas de Ford llamadas Interventions. que aplica los conocimientos técnicos de la automoción para ayudar a resolver problemas cotidianos.