Los simios fueron infectados por un laboratorio con virus para hacer experimentos científicos.
El uso de animales por parte de los laboratorios para testear sus productos o crear vacunas es un tema conocido, que incluso ha generado protestas por grupos animalistas a nivel mundial. La mayoría termina muriendo o se contagian enfermedades como consecuencia de este brutal maltrato, como sucede con 60 chimpancés que fueron liberados en una jungla llamada «Monkey Island», ubicada en Liberia, África.
Se trata de un lugar muy peligroso, ya que los simios están infectados con virus muy potentes. Son pocos los lugareños de la isla que se acercan a los animales para poder recolectar su comida y algunos turistas pagaron para verlos. Los rumores dicen que estos animales podrían atacar o comer a un humano por su agresividad, recoge The Sun.
«Si eres una persona extraña cuando vas allí, se vuelven agresivos. A lo único que le tienen miedo es al agua. No nadan, caminan por la orilla», le contó Jerry, uno de los habitantes del lugar, al diario inglés.
Algunos de los simios tienen grandes deformidades en la cara y fueron calificados como “monstruos”. Esto ocurrió por las pruebas científicas que hicieron sobre ellos en un controvertido laboratorio de pruebas de virus (Vilab) establecido por el Centro de Sangre de Nueva York (NYBC) en Liberia en 1974.
Los animales fueron infectados a propósito con enfermedades como la hepatitis y la “ceguera de los ríos” para ayudar a los científicos a desarrollar vacunas para ser utilizadas en humanos enfermos. Después de más de 40 años de experimentos, NYBC terminó el proyecto de Liberia a causa de una campaña de activistas en contra del maltrato y los chimpancés fueron liberados en la isla con poca comida o agua natural.
Desde entonces fueron alimentados de forma continua por los responsables del programa que se comprometieron hacerlo durante toda la vida, ya que el lugar donde se encuentran no tienen alimentos naturales para subsistir. Por ello, crearon una jaula natural donde tienen que ser alimentados en todo momento.
Pero por el costo, 30.000 dólares al mes que supone la alimentación diaria, el 5 de marzo de este año, el NYBC decidió no mantener más a los chimpancés. Desde entonces, Humane Society Internacional, un grupo de activistas que tiene como objetivo evitar el sufrimiento animal, decidió hacerse cargo de los chimpancés y la NYBC prometió 5 millones de dólares para pagar las futuras necesidades alimentarias y médicas de estos simios.