Bruce Dickinson en su libro, cuenta como la banda esquiva desde jeringas con sangre, botellas de orina, entre otros…
Una de las malas costumbres que tiene el fanático de la música, es lanzar objetos mientras los músicos presentan su espectáculo y Iron Maiden no está ajeno a ello. De hecho, Bruce Dickinson en su último libro llamado ¿Para qué sirve este botón? cuenta las experiencias que ha pasado con la banda y sus insólitos proyectiles.
Desde postres en Donington a jeringas con sangre que sobresalían del suelo en un show en Portugal, son las experiencias que contó Dickinson en su autobiografía.
El vocalista afirma: “En nuestras actuaciones han llegado municiones reales, rodamientos de bolas, monedas, carteras, lentes de sol, sujetadores, calzones, camisetas, banderas, hamburguesas, latas de cervezas, botellas de orina y cientos y cientos de zapatos».
En cuanto a lo último, Dickinson cuenta que no entendía el hecho de que los seguidores se fueran a su casa con un zapato para poder lanzar el otro, pero explicó lo siguiente: “El misterio de los zapatos me dejó perplejo durante años, hasta que finalmente se reveló el mecanismo. La verdad es que hay idiotas oportunistas que les roban los zapatos a aquellos que se lanzan a surfear sobre la multitud y los lanzan al escenario”.