El guitarrista recordó sus días de locura y excesos junto a Guns N’ Roses.
Slash fue miembro de una de las bandas más icónicas de los 80 y 90. Junto a Guns N’ Roses recorrió distintos escenarios alrededor de todo el mundo. Una época de descontrol donde la frase «sexo, drogas y rock n’ roll» era llevada a la práctica de forma recurrente por varias bandas de rock y heavy metal.
Una de ellas era precisamente la de Axl y Slash, donde el guitarrista de frondosa melena tuvo serios problemas de abuso de alcohol y drogas debido a la salvaje vida que llevaba. Así lo reconoció recientemente en un programa de televisión.
«Fueron bastante salvajes los ochenta y noventa ¡Ni siquiera recuerdo los noventa!», reconoció el guitarrista de 53 años en el programa australiano «The Project».
Su vida de desenfreno lo llevó a estar al borde de la muerte. En 2001 fue diagnosticado con miocardiopatía producto del consumo de heroína. Le dijeron que tenía entre seis días y seis semanas de vida. Se salvó gracias a la implantación de un desfibrilador y desde el 2006 que está sobrio, según señala Daily Mail.
Slash aclara que el hecho de que ya no beba alcohol no quiere decir que haya dejado de ser un amante del rock. «Soy un rockero completo, solo me estoy recuperando de las drogas y el alcohol», dijo.
En la oportunidad aprovechó de hablar sobre su último disco «Living the dream». «A la luz de lo que está pasando políticamente, sobre todo en Estados Unidos, el álbum era un reflejo sarcástico de lo que pasaba allá afuera».