La araña fue bautizada como Ceratogyrus attonitifer del latín “portadora del asombro”.
El arácnido fue descubierto en una parte poco explorada de Angola mientras el Dr John Midgley hacía una expedición.
Según informa la revista National Geographic que el entomólogo (estudioso de los insectos) examinó a la tarántula de aspecto extraño que acababa de capturar y notó con asombro que tenía un cuerno grande, ligeramente blando, sobre la espalda del animal.
Como Midgley no es un experto en arañas, tuvo que enviarle fotos a su amigo Ian Engelbrecht en la Universidad de Pretoria quien, no sin antes acusarlo de photoshopping, le confirmó que era una especie nueva. “Supe entonces que habíamos descubierto una nueva especie” Dijo a National Geographic. “Es raro saber que tienes algo especial tan pronto en el proceso ”, agregó.
La araña es única en el mundo ya que no existe un arácnido conocido que tenga una protuberancia como tal en la espalda. Fue bautizada como Ceratogyrus attonitifer del latín “portadora del asombro”. Esta tarántula apenas ocupa el tamaño de una mano y se alimenta de insectos. Pertenece a un grupo de arañas que reciben el nombre de babuinos, porque son muy peludas. Además, algunas de ellas suelen tener una especie de pequeños cuernos, pero nada que ver con la que os estamos presentando. Además, estos arácnidos son más pequeños en tamaño y esas protuberancias apenas tienen unos milímetros y son duras (como el exoesqueleto de un insecto). Por lo tanto, aunque puede tener ciertas similitudes, parece más bien un primo lejano de la familia.
Aunque aún no se sabe mucho de este fabuloso hallazgo, los científicos están deseosos de seguir investigando.