La U está en posiciones de descenso, es cierto, pero no creo que falte mucho para que abandone esa zona.
Por Cristian Arcos, AS.com.
A los periodistas nos gustan los titulares rimbombantes. Quien diga lo contrario, miente. Existe una nociva práctica, arraigada en algunos medios y colegas, de salir a reportear con el titular listo. Forzar la historia y los testimonios para que encajen con ese título predispuesto. Craso error. La fotografía de la tabla de posiciones es indesmentible: hoy la Universidad de Chile aparece en el penúltimo puesto. Incluso si el colista (Cobresal) gana su partido pendiente, los azules quedarían últimos. Todo eso es matemáticamente cierto, pero el análisis debe ir mucho más allá de los números.
La U ha tenido un mal arranque de torneo. Cuatro unidades de 18 puntos posibles es muy poco para cualquier equipo, amplificado cuando hablamos de un cuadro de los grandes, con billetera más generosa que la mayoría, instalaciones de primera, historial potente e hinchada numerosa. Pero van apenas seis fechas de un torneo que tiene treinta partidos. Muy poco para sacar conclusiones tajantes o establecer candidatos ya sea para ser campeón o descender.
Universidad de Chile perdió uno de esos partidos extraños. Si alguien no vio el pleito y se queda con el marcador 3-1 en favor de Antofagasta, puede pensar que fue un paseo, pero ese diagnóstico es errado. Los nortinos tuvieron el mérito de la eficacia en el arco contrario y de contar con un sobresaliente Agustín Rossi en el propio. Pero el equipo de Alfredo Arias mostró señales positivas. Si logra mantener el rendimiento del primer tiempo, ganará muchos más partidos de los que va a perder. El tema en la U sigue siendo la efectividad en arco ajeno. El goleador del equipo hasta ahora es Matías Rodríguez, su lateral derecho. Seguramente eso cambiará con el correr de la competencia pero grafica el momento actual. Los delanteros no la están embocando. El jugador que cumpla la misión de nexo, enlace, conector entre la mitad de la cancha y el ataque, parece no estar en la plantilla.
La U tiene mucho que mejorar. Muchísimo. Aparte de la sequía goleadora ha mostrado poco poder de reacción. Le hacen un gol y parece no encontrar las respuestas para levantarse. La confección del plantel parece dispareja. Pero el primer tiempo contra la Universidad de Concepción y la misma fracción ante Antofagasta, muestran que hay un camino.
La U está en posiciones de descenso, es cierto, pero no creo que falte mucho para que abandone esa zona. Si puede o no aspirar a alturas mayores, esa es otra historia, con pronóstico mucho más difícil de acertar.