El elenco estudiantil tuvo prácticamente una jornada tranquila en San Carlos de Apoquindo.
«Entre el cielo y la noche». Con esa frase se podría graficar lo que ocurrió en San Carlos de Apoquindo, luego de que Universidad Católica pasó por encima de la U, al llevarse el Clásico Universitario con un contundente 4-0.
Fue la muestra de la diferencia de momentos que atraviesan ambos elencos, puesto que por un lado el cuadro cruzado quedó en la cima del torneo y peleando su clasificación en Copa Libertadores, mientras que los azules se siguen hudiendo en el fondo de la tabla de posiciones y mostrando un pobre desempeño futbolístico.
En los primeros 45′, la UC manejó las acciones, pero le faltó el gol; mientras que la U intentaba hacer algo, y si bien contó con un par de ocasiones, no logró desequilibra e inquietar el arco de Matías Dituro.
Fue en la segunda parte que vino el festival de goles para los de la franja, ya que desde los 46′ se puso en ventaja, tras una rápida acción en la que falló en la cobertura Rafael Caroca y que permitió que José Pedro Fuenzalida se fuera contra el arco de Johnny Herrera y lo batiera con un remate cruzado.
De ahí en más, el partido fue ampliamente controlado por los locales, ya que más tarde, a los 60′, Edson Puch amplió el marcador, ante una U que se fue totalmente del partido. Lo que quedó un poco demostrado con el tercero parcial de Duvier Riascos a los 67′, quien la picó ante la salida del arquero laico.
El punto final quizás para lo que hicieron los estudiantiles en San Carlos de Apoquindo llegó con la expulsión de Gonzalo Espinoza, quien cometió una infantil agresión en contra de Luciano Aued a los 75′.
Finalmente, y tras una falta evidente de Herrera en contra de Riascos desde fuera del área, llegó el cuarto y definitivo tanto, con un cabezazo de Aued a los 86′.
Un triunfo merecido y contundente de la UC, que llegó a la cima del torneo con 19 puntos. En tanto, la U profundizó su crisis y se mantiene penúltimo en la tabla de posiciones, con solo cinco unidades.