La investigación llegó a la conclusión que los adultos mayores que resuelven regularmente este tipo de acertijos tienen cerebros que funcionan mejor.
Mantener la mente ocupada parece ser la única manera de combatir la vejez y sobrellevarla de la mejor forma posible. Así lo ha confirmado un estudio realizado por la Universidad de Exeter y el King’s College de Londres, que contó con la participación de más de 19.000 adultos mayores.
Publicados en la revista International Journal of Geriatric Psychiatry, los resultados muestran que los ancianos que que hacen regularmente pasatiempos de palabras o número, como crucigramas y sudokus, tienen cerebros que funcionan mejor, en comparación con aquellos que no lo hacen.
Como parte del estudio, se pidió a los participantes que informaran con qué frecuencia realizaban crucigramas y sudokus, y realizaran una serie de pruebas cognitivas sensibles a la medición de los cambios en la función cerebral. Descubrieron que cuanto más rompecabezas resolvieran, mejor se desempeñaban en las tareas de evaluación de la atención, el razonamiento y la memoria, recoge ABC.
«Las mejoras son particularmente claras en la velocidad y precisión de su desempeño. En algunas áreas, la mejora fue bastante importante. No podemos decir que jugar estos rompecabezas necesariamente reduzcan el riesgo de demencia en el futuro, pero esta investigación respalda los hallazgos anteriores que indican que el uso regular de los acertijos de palabras o números ayuda a que nuestros cerebros funcionen mejor por más tiempo», explicó la doctora Anne Corbett, quien dirigió el estudio.
Los investigadores llegaron a la conclusión, a partir de los resultados, que las personas que hacen crucigramas tienen una función cerebral equivalente a diez años más joven que su edad en pruebas que evalúan el razonamiento gramatical, y ocho años más jóvenes en los test que miden la memoria a corto plazo.