En total, doce policías fueron formalizados por los delitos de tortura, detención ilegal, apremios ilegítimos y falsificación de instrumento público.
Cinco carabineros de la 21 Comisaría de Estación Central quedaron en prisión preventiva tras ser formalizados por los delitos de tortura, detención ilegal, apremios ilegítimos y falsificación de instrumento público.
Los policías son Carlos Leal Aqueveque, Carlos Calderón Ortega, Carlos Soto Soto, Camilo Vásquez Masman y Cristián Almuna Salgado, quien tiene cargo de capitán y, pese a que la Fiscalía no había pedido la medida cautelar para él, el tribunal consideró que, dado su rango, ameritaba dicha decisión.
El Ministerio Público también había pedido prisión preventiva para los uniformados Francisca Burgos Rojas y Luis Núñez Medi, pero el tribunal lo descartó porque sólo enfrenan cargos por torturas.
El fiscal de alta complejidad Centro Norte, Francisco Ledezma, explicó que otros siete funcionarios seguirán en libertad durante el proceso y quedaron con «prohibición de acercarse a las víctimas, firmas diarias y quincenales, y arraigo en el territorio nacional; es decir, no pueden salir del país».
Luis Durán Sánchez, Gastón Gómez Bello, Juan Trigo Chávez y Luis Manzanares Antiñir, y Luis Henríquez Guzmán quedaron con firma, arraigo y prohibición de acercarse a la víctima.
Los doce carabineros son investigados por hechos ocurridos entre octubre de 2016 y diciembre de 2018. De acuerdo con el abogado regional metropolitano del Instituto Nacional de Derechos Humanos, Daniel Cárdenas, las denuncias corresponden a 10 delitos, como el uso de perros y golpes en lugares sin cámaras.