El ‘rolling stone’, que celebra su cumpleaños, está recuperado de sus problemas de corazón y mantiene una relación sentimental estable.
Por El País
El 26 de julio Mick Jagger cumple 76 años con el corazón tranquilo, tanto en sentido literal como figurado. Tras la operación en la que le reemplazaron una válvula cardíaca en abril, el líder de Los Rolling Stones ha vuelto a los escenarios con su gira No Filter en tiempo récord —aunque a su equipo ahora se ha sumado un cardiólogo— y pasará el mes de agosto actuando con su banda en varias ciudades de Estados Unidos. En lo personal, Jagger ha cumplido cinco años de relación con la bailarina Melanie Hamrick, de 32 años, y madre de su octavo hijo, Deveraux, nacido en diciembre de 2016. A la pareja la separa un océano de distancia, ya que Jagger tiene su base en Londres y Hamrick, que pertenece al cuerpo de baile del American Ballet Theatre, vive en Nueva York con el niño. Sin embargo, esa circunstancia podría estar a punto de cambiar, pues ella acaba de anunciar vía Instagram que cuando termine la temporada de otoño se retirará de la compañía. No ha especificado a qué se dedicará después, pero a principios de año ya se había tomado una excedencia temporal para crear la coreografía de Porte Rouge, un ballet con música de los Stones que se representó en San Petersburgo y Nueva York esta primavera.
Aunque no se dejan ver juntos a menudo y pese a lo atípico de su situación, en una entrevista para la revista You en octubre de 2018 Hamrick describió a Jagger como “el padre más increíble, maravilloso y cariñoso”, y aseguró que estaban criando a su hijo juntos: “Siento como si tuviera más apoyo de él que el que algunas de mis amigas casadas reciben de sus maridos. Con WhatsApp, FaceTime y las redes sociales, ahora es posible mantener una relación estrecha incluso a larga distancia. Creo que las normas de las relaciones han cambiado. O tal vez es que yo soy muy moderna e independiente”. Sobre la fama de mujeriego de Jagger, añadía: “Me siento muy segura en mi relación. Siempre habrá rumores en los periódicos, pero sé lo que tenemos Mick y yo, así que no les presto atención”.
Los Jagger son una familia poco convencional, de eso no cabe duda. El cantante tiene ocho hijos con cinco mujeres distintas (Karis, con Marsha Hunt; Jade, con Bianca Jagger; Elizabeth, James, Georgia May y Gabriel, con Jerry Hall; Lucas, con Luciana Gimenez Morad; y Deveraux, con Melanie Hamrick), además de cinco nietos y una bisnieta, Ezra (la nieta de Jade Jagger), que tiene casi tres años más que Deveraux. En un artículo que escribió para el Vogue británico hace un año, Jade Jagger pintaba así la estampa: “Mi padre tiene ahora ocho hijos con cinco compañeras, una red de apoyo trotamundos que parece estar en constante expansión. En un año cualquiera, todos podríamos irnos juntos de vacaciones al Caribe o salir de gira con los Rolling Stones por Europa; son reuniones familiares donde los roles tradicionales pierden todo su significado en medio del caos y la risa”.
Pero no siempre ha sido todo tan idílico. En el historial sentimental de Jagger hay documentados innumerables adulterios, no pocos escándalos y algún hijo extramatrimonial. Hay incluso quien se ha atrevido a ponerle cifra a su reputación de seductor: Christopher Andersen, autor de la biografía Mick: The Wild Life and Mad Genius of Jagger, afirmó en 2012 que el músico se habría acostado con unas 4.000 mujeres. Su primera novia conocida fue Chrissie Shrimpton, hermana de la modelo Jean Shrimpton, a la que dejaría por Marianne Faithfull, con quien formó una de las parejas más icónicas de los 60 (y que, tras la ruptura, cayó en una espiral autodestructiva y acabó viviendo en la calle dos años). La siguió Bianca Jagger, con quien estuvo casado de 1971 a 1978, aunque entre Marianne y Bianca le dio tiempo a dejar embarazada a la actriz Marsha Hunt.
Su relación más larga (de 1977 a 1999) fue con la modelo Jerry Hall, madre de cuatro de sus hijos. Se casaron en Bali en 1990 en una ceremonia hindú cuya validez legal él se apresuró a negar —y los tribunales le dieron la razón— en cuanto Hall le pidió el divorcio. En sus dos décadas juntos, la texana —que ahora está casada con Rupert Murdoch— había transigido con numerosas infidelidades, pero que el músico tuviera un hijo secreto con la modelo brasileña Luciana Gimenez le resultó imposible de tolerar.
Carla Bruni, Angelina Jolie, Uma Thurman, Sophie Dahl… la lista de amoríos que se le atribuyen a Jagger está llena de nombres conocidos. Muchas de sus relaciones acabaron en lágrimas (según la biografía de Christopher Andersen, Bruni llegó a decir: “Me despertaba todas las mañanas desesperada. Pensé que nunca me volvería a enamorar”), pero ninguna tuvo un final tan dramático como su noviazgo de 13 años con la diseñadora L’Wren Scott, que se suicidó en marzo de 2014 por motivos que no han salido a la luz. El 28 de abril, el cantante la recordó en Instagram en el que habría sido su 55º cumpleaños.
En una cita incluida en el libro de Andersen, Marianne Faithfull opinaba que “Mick básicamente desprecia a las mujeres; solo existen como reflejos suyos” y Natasha Terry, una terapeuta que afirmaba haber tenido un affaire con él, lo describía como “un vampiro sexual”. Pero Jagger The Shagger (esa rima tan fácil como vulgar, traducible como ‘Jagger el follador’, que le pusieron como apodo) ya es bisabuelo y, a las puertas de los 76 años, parece haber jubilado para siempre la faceta de calavera con la que durante tanto tiempo hizo bandera del lema contracultural «sexo, drogas y rock and roll»