La seguridad que acompañó a Jair Bolsonaro podría haber generado problemas de comunicación entre los encargados del VAR y el juez central.
El VAR nuevamente entra en la polémica durante esta Copa América. Como si no fuese suficiente el gol milimétricamente anulado a Alexis Sánchez en el partido contra Colombia, ahora dos nuevas situaciones han formado parte del análisis posterior al duelo de Brasil -organizador de esta edición de la Copa- con Argentina.
Un rodillazo de Dani Álves a Sergio «Kun» Agüero y un codazo de Arthur a Nicolás Otamendi fueron las acciones que el árbitro uruguayo Leodan González le habría comunicado a Roddy Zambrano, quien finalmente no pitó ninguna de las faltas.
Según relata el medio DobleAmarilla, González reconoció que Zambrano «fue alertado en las dos situaciones de penal, y en el caso de la segunda el llamado fue más enérgico».
«No se si no me escuchaba, o que pasaba, porque en varias oportunidades preguntaba qué le habíamos dicho o pedía que se lo repitamos», intentó explicar el réferi.
¿Y qué habría ocasionado aquel problema de comunicación? Según expone el mismo medio, la seguridad del presidente brasileño Jair Bolsonaro habría ocupado la misma frecuencia de radio que la utilizada por los árbitros a cargo del VAR para hablar con el juez central, aunque indican que aquello habría quedado solucionado antes del pitazo inicial.
Al parecer, desde el otro lado de la Cordillera ya se resignaron ante la derrota sufrida el pasado martes, publicando un escueto comunicado a través de Twitter:
@Argentina 🇦🇷💙 pic.twitter.com/xhEgEBp2FY
— AFA (@afa) 3 de julio de 2019