«Tanto el Gobierno como las Fuerzas Armadas y de orden tenemos un sólido y profundo compromiso con los derechos humanos», dijo el presidente.
Sebastián Piñera aseguró que el Gobierno no tiene «nada que ocultar» en materia de derechos humanos, tras la serie de denuncias de vejaciones cometidas por miembros de la Fuerzas Armadas y policías durante el estado de emergencia decretado por el presidente en medio de las manifestaciones sociales.
«Tanto el Gobierno como las Fuerzas Armadas y de orden tenemos un sólido y profundo compromiso con los derechos humanos», dijo el mandatario durante la ceremonia de cambio de mando y aseguró que las denuncias «deberán ser resueltas por la justicia».
En su discurso, Piñera afirmó que los días pasados fueron de «dolor y esperanza». Al hablar del «dolor», primero mencionó «la brutal ola de violencia y destrucción» que desató un “pequeño grupo” y después mencionó que, sin embargo, “lo más doloroso ha sido la pérdida de vidas humanas”.
“La democracia tiene el deber de defenderse de sus adversarios, usando todos los instrumentos que el orden democrático, la Constitución y la ley le otorgan y respetando en todo momento, bajo cualquier circunstancia, los derechos humanos de todos los ciudadanos”, agregó.
El presidente, además, destacó “la difícil y abnegada labor” de las Fuerzas Armadas y las policías.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Derechos Humanos, durante el estado de emergencia cinco personas murieron por acción de agentes del Estado.